Hola

Este blog es de las gracias y desgracias de un actor venido a menos, de un político idealista que lleva las de perder, un amante de la cerveza con la que a veces se pelea y un enamorado de Vida.
Sírvanme estas líneas de desahogo y rienda suelta de exhibicionismo.

sábado, 26 de marzo de 2011

Gracias


Quiero compartir algo con vosotros... he llegado hace un rato del trabajo, cansado y mucho, me he puesto a poner una lavadora y recoger la ropa tendida, sí, a las 22:15 de la noche... cosas que tiene vivir solo jejeje, la cuestión es que he vuelto a salir a la terraza, cielo estrellado y birra en mano y de repente me he sorprendido a mi mismo al decir en voz alta "Gracias". Y me he sorprendido por que realmente, os lo juro, no se ni por que lo he dicho, ni a quien se lo he dirigido y ni siquiera por que estoy agradecido. Es posible que simplemente la agradezca a la vida que no me va mal del todo, quizás lo que le agradecía a la vida era ese segundo de tranquilidad después del jodido día, quizás te lo agradecía a ti, que ordenaste mi vida y que como representación de ello siempre he tenido a la lavadora que sonaba de fondo... o quizás a ti Anito, que no he sido capaz de pagar la primera sonrisa del día que me has arrancado con tu sms. O quizás no es nada de eso y realmente estoy agradecido a otro y por otra cosa en la que no caigo... Os juro que esta historia es real, y que he dado las gracias en alto sin saber por que. En fin, a todos a los que os debo algo... Gracias, mi subconsciente lo secunda :)


miércoles, 16 de marzo de 2011

Maldita Noche...



Menudos días... y lo que me espera... La verdad es que no me importa, ni de lejos, dedicarme 23 horas al día a cambiar el mundo, lo malo es cuando llegas exhausto a casa y la vida, que es muy puta, aprovecha tu debilidad para metértela doblada, concretamente, en la cabeza. Siempre he odiado la maldad de algunos sueños que, estando tu de puta madre, son capaces de hacerte amanecer con lágrimas en los ojos, pero lo peor es que despierto, siendo consciente, multitud de recuerdos recorran absolutamente todo tu cuerpo, que hastiado por el duro día no es capaz de oponer la más mínima resistencia y te deja hecho (aun más) un guiñapo justo antes de ir a la cama para enfrentarte con tu subconsciente que como ya he dicho, es hijoputa de por si. Te levantas con ojeras con el complicado objetivo de volver a retomar la lucha por el cambio del mundo... ya he perdido 3 kilos... y los que me quedan. Gracias a Dios, o a quien sea, esto se supone que tiene fecha de caducidad... pero como dice la canción... "Dicen que el tiempo cura los corazones rotos... pero yo se que nunca se quedan como nuevos..."